ARTICULO REVISTA

Si es por navegar espartanamente y sin poner en duda la valía de Weil , Moitessier dio vuelta y media al mundo a vela por la ruta de los clippers, en solitario, sin escalas y sin radio. Sólo con un tirachinas para lanzar mensajes a las cubiertas de los mercantes que se cruzaba. Casi un siglo antes Joshua Slocum hizo lo propio en un barco reconstruido por él no ya sin radio, sino con instrumentos de navegación escasos incluso para las embarcaciones de recreo menos ambiciosas. Ambos libros estan en español, y especialmente el de Slocum son tan interesantes como amenos.

Dicho esto, me interesa especialmente ese artículo que citas;  a ver si cojo la revista.

Hola.

Un libro interesante es “La vuelta al mundo del Gipsy Moth” escrito por Sir Francis Chichester, que batió el record de circunnavegación navegando en solitario por la ruta de los Clipper en 1966, cumpliendo sus 65 años en plena navegación.

Pero yo, que he navegado a vela un poco, alucino de este “loco”, Hugo Vihlen, que sí llevaba radio y atravesó el Atlántico en 1993 desde Terranova a Inglaterra a bordo del Father’s Day, de tan solo 1,63 m de eslora.

Adjunto un vídeo curioso de la Kon-Tiki, que llevaba un equipo QRP para CW de 7 W, y en el que se ve a uno de los dos operadores de radio fabricar hidrógeno, aprovechando una reacción química con el agua de mar, para llenar el globo que soportaba el hilo de antena.

Buena radio y buena proa.

Publicado por: @ea3erd

Hola.

Un libro interesante es “La vuelta al mundo del Gipsy Moth” escrito por Sir Francis Chichester, que batió el record de circunnavegación navegando en solitario por la ruta de los Clipper en 1966, cumpliendo sus 65 años en plena navegación.

Si, lo conozco, navegaba solo pero llevaba lo último de lo último en su momento, y bastantes comodidades. El libro está bien, da bastantes detalles técnicos de cómo iba aparejado y preparado.

Pero yo, que he navegado a vela un poco, alucino de este “loco”, Hugo Vihlen, que sí llevaba radio y atravesó el Atlántico en 1993 desde Terranova a Inglaterra a bordo del Father’s Day, de tan solo 1,63 m de eslora.

Es tener mucha moral, hasta los que cruzan el Atlántico a remo tienen más espacio.